Instrucciones
Debe practicarse en la mañana, al momento de levantarse al aire libre o al menos ante una ventana abierta. Levántese media hora mas temprano.
De pie o sentado en una silla de espaldas recto. Con el espinazo perfectamente erecto; examine despacio, que cada vértebra del espinazo este exactamente una encima de otra. Levante los codos a 45 grados de los lados del cuerpo, colocando las manos frente al pecho, con los dedos de la mano tocando los correspondientes de la otra, que las manos disten unos 8 centímetros del pecho. (1) Junte los talones colocando los pies en ángulo de 45 grados. Ahora, inhale constantemente y sin esfuerzo, y al hacerlo, alce él estomago y el pecho, expandiendo este ultimo a medida que se llene de aire, y al mismo tiempo alce las manos y flexione la cabeza hacia atrás (sin mover la posición del espinazo) hasta que los últimos espacios de los pulmones estén llenos de aire.
Ahora, exhale, dejando que la cabeza vuelva a su posición original y las manos bajen, todo ritmicamente. Vuelva a inhalar del mismo modo y con los mismos movimientos, y a exhalar de la misma manera 49 veces, o sea 7 veces 7.
La mejor manera de hacer esta respiración es: contar mentalmente «siete», haciendo luego una pausa de un minuto, sin mover la posición, y entonces, otros siete, y otros siete, hasta completar los «siete sietes».
Inhale por la nariz, sin excesiva rapidez, pero constantemente y con gran vigor, llenando el cuerpo de todo el aire que le sea posible. Exhale por la boca, y cuide que en cada respiración se arroje hasta el ultimo átomo de aire, antes de inhalar nuevamente.
Es esencial, antes de comenzar la respiración, asegurarse de que las narices estén perfectamente limpias. Nunca se trate de respirar con uno o ambos pasajes de aire obstruidos.
Trabajo espiritual
Ejercicio de relajación
«Ahora, imagino una gran luz en el tope de mi cabeza. El tope de mi cabeza esta pesado y relajado. La frente esta relajada. Los ojos están pesados. Los músculos de la cara caen, no hay presión en los dientes, la quijada cae suavemente. Los brazos y las manos están muy pesados……. Mas, ¡OH, cuan feliz me siento! Me siento feliz en todo mi ser, particularmente en mi hermosa faz. Mi cara esta bañada de sonrisas, siento una suave presión de dentro hacia fuera, que borra todas las líneas de mi faz, las líneas que dejaron la preocupación, el dolor, las dificultades, el miedo….. ¡Me siento feliz en todo mi ser!
«Ahora, la luz desciende. Se relaja el pecho, el abdomen cae, la luz desciende hasta las puntas de los dedos de los pies».
«Ahora, imagino aquella gran luz en la parte de atrás de mi cuello. Estoy viendo hacia abajo mi bello espinazo. Me parece que estoy viendo una gran cascada, que ilumina la luz del sol. Veo incontables particulas iridiscentes de Luz… Luz… Luz… y yo sé que todo mi cuerpo esta lleno de Luz.» «Si tu ojo es único (El Ojo Eterno), el ojo espiritual, el ojo que ahora estoy usando, el ojo único, el tercer ojo)…. si tu ojo es único, tu cuerpo todo estará lleno de Luz». Y se que cada célula de aquel numero incontable de células de mi cuerpo es una Luz, una lámpara, una antorcha que me trae la LUZ DE LA SABIDURÍA DIVINA DENTRO DE MI Estando esta Luz en perfecta correspondencia con la llama, como la llama esta en perfecta correspondencia con el fuego del Amor Divino, que esta en el centro de los Centros de mi mas intimo ser.
«y ahora….. sintiéndome feliz, dando gracias….. lentamente, casi sin darme cuenta, aspiro un poquito de aire, y lo arrojo en una respiración como suspiro; largo, hondo, barredor».
«Ahora, tomo otra pequeña inhalación y la arrojo violentamente».